Shut the door.

Me he sentido muy bien, mi salud está impecable, mi trabajo va bien, mi familia está mejor, todo se ha ido acomodando.

Hace unos días conversaba con mi amiga Silvia, lo importante que es cerrar la puerta a esas personas venenosas que te roban la energía, dar espacio a las personas que sí merecen contar contigo y ofrecer siempre lo mejor de ti.

Aún con mis alumnos, he tenido que trabajar esa parte, no todos son buena onda y yo tampoco soy buena onda en varias ocasiones me he pasado de la raya, pero nosotros decimos 'que así debe ser', no es necesario ser amigo de todos, debes aprender a decir no, no me interesa tu amistad.

Cuando hay estabilidad en la vida, es increíble cómo se ve el panorama, tan claro, tan limpio... sólo hacía falta, cerrar la puerta.