Muy recomendable el artículo del CoLatino.
En paso por España, viví de cerca el trato a nosotros, los americanos y americanas. A partir de ahí podemos hablar de democracia. Para empezar el secretario de master era un alemán nefasto que todo el curso nos recordó a los becados, lo agradecidos que debíamos estar por la oportunidad, está bien, una vez lo entiendo, no más. Al final le dejamos claro que también estábamos ahí, no por casualidad, sino por mérito. Lo mandaron un año a Harvard y regresó.
El tema es que en Europa se mira a América, como un continente que necesita una transformación mental, que estamos atrasadísimos en temas como Derechos Humanos y Democracia. Se mira a América como un continente de desilusiones y fracasos.
Nuestras frágiles democracias en América nos indican que el sub desarrollo está en la mente, sí podemos, si queremos.
Yo estoy convencida de que América ha sido paciente pero merecemos más. Nuestro destino es próspero si solo quienes tienen la responsabilidad de manejar el futuro albergamos el ánimo de promover los cambios necesarios para robustecer este estado actual de las democracias.
viernes, julio 25, 2008
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1 comentario:
Me gusta cuando tratas temas de esta indole... Más aun cuando agarras seriedad. ILY
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